El cambio del líquido o aceite de las transmisiones automáticas es una de las operaciones que mayor aumento ha experimentado en el taller en los últimos años. No en vano, si entre 2010 y 2016 los coches con cambios automáticos apenas suponían un 6,5% de las matriculaciones, esta cifra era ya del 12% en 2017. Y desde entonces el incremento ha sido mucho más vertiginoso aún si cabe (en gran medida por el aumento de las ventas de vehículos híbridos), hasta suponer el 38,1% de las matriculaciones sólo en el primer semestre… de 2021.
Esto quiere decir que la tendencia al alza es más que evidente. Tanto que son cada vez más los expertos que señalan, incluso, que los días de los cambios manuales están contados. Sin embargo, mientras asistimos a ver si se cumplen o no estas predicciones lo cierto es que cada vez más son los clientes que acuden al taller para la sustitución del líquido o aceite de las transmisiones automáticas. Una operación que el mecánico profesional puede realizar de forma eficiente y rentable para su negocio (al tiempo que plenamente satisfactoria para su cliente), con los aceites para transmisiones automáticas de BG Products…
¿Por qué es importante el aceite de las transmisiones automáticas?
Las transmisiones automáticas requieren de presión hidráulica para su funcionamiento. Por ello, se desarrolló un líquido que generase dicha presión para mover todos los componentes de la transmisión. Además, este fluido también lubrica todos los elementos internos y los protege contra el desgaste, las altas temperaturas….
Sin embargo, conforme pasan los kilómetros, el aceite de las transmisiones automáticas pierde algunas de sus propiedades originales, como la viscosidad, lo que provoca que la presión hidráulica deje de ser eficiente, de modo que el conductor empezará a percibir fallos en el cambio de marchas. Es entonces cuando ha llegado el momento de cambiar el líquido de la transmisión.
En general, y salvo que el fabricante del vehículo diga otra cosa, lo más recomendable es sustituirlo cada 100.000 kilómetros o cada 8 años (lo que antes ocurra).
La revisión del nivel del líquido de la transmisión
Mantener un nivel correcto de aceite ayudará al cliente de nuestro taller a evitar averías. De ahí, la importancia de recomendar a nuestro cliente su vigilancia cada cierto tiempo. Además, en el taller, conviene comprobarlo en cada revisión periódica. Y es que tan malo es que el nivel del aceite de las transmisiones automáticas esté bajo como excesivamente alto.
Si el nivel del líquido ATF (también conocido así por las siglas del inglés Automatic transmission fluid) está bajo, la bomba de aceite arrastrará aire junto con el fluido, lo que producirá burbujas en el interior del circuito hidráulico. Esto a su vez hace que disminuya la presión hidráulica y provoca cambios lentos y deslizamiento de los embragues y frenos.
Por el contrario, si el nivel de fluido es excesivo, los engranajes lo batirán transformándolo en espuma y se producirán las mismas consecuencias que pueden ocurrir con el nivel bajo.
De igual forma, es fundamental elegir el aceite correcto para cada transmisión (cada tipo usa uno específico). Y es que el uso de un fluido incorrecto no sólo puede causar una mala calidad en la ejecución de los cambios, sino que además puede producir daños, incluso, la rotura de la transmisión, provocando una grave (y cara) avería (mala relación en los paquetes de embrague, ruidos por rodamientos, horquillas… roturas y desgaste, mala gestión electrónica, fallos en las electroválvulas, rotura del tambor donde se alojan los discos, fallos en la bomba del aceite…).
Aceite de las transmisiones automáticas: las soluciones de BG Products
Para facilitar el trabajo en el taller, BG Products ayuda al mecánico profesional con una solución adaptada a cada tipo de caja de cambios.
De este modo, para los cambios automáticos por convertidor de par, los talleres disponen de dos tipos de fluidos: ATF Premium y ATF Baja Viscosidad, que ofrecen una excelente protección térmica y de control de la corrosión.
Mientras, para las transmisiones automáticas con variador continuo (CVT), la solución de BG Products pasa por el fluido PN 318 Universal CVT Fluid, que, además de una excelente protección de los componentes internos, ofrece una estabilidad térmica superior.
Por último, para los cambios automáticos de doble embrague (DSG, S-tronic, PDK, DKG, EDC…), que precisan un mayor mantenimiento al del resto de opciones, el mecánico profesional cuenta con BG Universal Synthetic DCT Fluid, que mantiene en perfecto estado todos los sincronizadores, rodamientos y embragues húmedos, y proporciona una protección excepcional de los componentes y una mayor fiabilidad del servicio.
Como ves, desde BG Products y Guaja Trading ayudamos a los negocios de mantenimiento y reparación de vehículos a generar más ingresos, optimizar sus recursos y mejorar su rentabilidad con operaciones que, además, consiguen clientes satisfechos.
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