Cinco características de los motores GDI (y cómo conseguir que mantengan sus prestaciones)

Cinco características de los motores GDI (y cómo conseguir que mantengan sus prestaciones)

Hasta no hace mucho tiempo, cualquiera que sabía un mínimo de mecánica tenía claro que un motor de gasolina V8 era rápido, potente y que consumía mucho carburante. Mientras, uno de cuatro cilindros era más lento, menos potente, aunque más ahorrador en combustible. Sin embargo, esto ha cambiado con la inyección directa de gasolina (GDI, por sus siglas en inglés).

Y es que cuando los fabricantes han puesto a trabajar a los motores de gasolina como lo venían haciendo los diésel, el mercado ha dado un giro radical y las carreteras se vuelven a llenar de coches de gasolina tan potentes o más que los de antes, pero con consumos más contenidos y menos contaminantes.

Por eso, no es de extrañar que en sus primeros siete años en el mercado, el motor GDI creció de ser insignificante a pasar a ser el 38% de todos los automóviles vendidos en Estados Unidos y que estos motores acumulen premio tras premio.

Pero ¿cómo son realmente los motores GDI? ¿Sabe el cliente del taller qué necesidades tienen? Podemos decir que los motores GDI tienen cinco características que los hacen únicos.

1. Tienen un rendimiento complejo

Esencialmente, un motor GDI tiene tres atributos de rendimiento notables: potente, eficiente en combustible y de combustión limpia. Para lograr los tres, el GDI está construido como un diésel, pero funciona con gasolina.

Al igual que en los motores de gasóleo, los inyectores GDI están ubicados dentro de la cámara de combustión para inyectar la combinación correcta de combustible y aire para producir una combustión más completa en el momento más oportuno.

2. Actúan con precisión

El tiempo de inyección, la coordinación y la colocación del inyector dentro de la cámara de combustión son esenciales para la eficiencia del motor GDI. Con el inyector dentro de la cámara de combustión, la ECU del motor tiene un control más preciso sobre la cantidad de combustible rociado durante la inyección. Esta precisión de inyección crea una explosión más completa con más potencia y muy poco desperdicio de combustible.

3. Sus ‘enemigos’ pueden no parecer peligrosos

Si el inyector no rocía combustible limpio, la válvula de admisión GDI se recubre rápidamente de carbonilla. Así, los depósitos de carbonilla pueden acumularse significativamente y, acabar, ahogando el suministro de aire del motor, reduciendo la potencia y emitiendo humo negro excesivo.

4. Reciben una paliza bajo presión extrema

La acumulación de carbonilla causa problemas importantes en tres áreas principales: inyectores, admisión y en las cámaras de combustión. Muchos de estos problemas se deben a la ubicación del inyector. Constantemente expuestos a los elementos extremos de la cámara de combustión, los inyectores pueden taponarse rápidamente con depósitos que afectan al rociado de combustible.

Entonces, los depósitos de carbono se calientan y se adhieren a los pistones porque los inyectores no están en condiciones de rociarlos con combustible limpio.

Y debido a la ubicación del inyector dentro de la cámara de combustión, el combustible no puede ‘lavar’ las válvulas de admisión para protegerlas de más acumulación de depósitos. De hecho, si espera hasta el primer cambio de aceite, a lo largo de miles de kilómetros, estas válvulas no estarán limpias en absoluto.

Las válvulas de admisión están ubicadas en la parte inferior de un colector de admisión muy complejo, justo encima de la cámara de combustión. Como resultado, los depósitos de hidrocarburos se acumulan rápidamente y se ‘cuecen’ en la parte posterior de las válvulas.

5. Necesitan una defensa adecuada para funcionar correctamente

Debido a la acumulación de depósitos en inyectores, puertos de admisión y válvulas, y cámaras de combustión, muchos conductores con nuevos vehículos GDI han notado pérdida de rendimiento, caída de eficiencia y mayores emisiones ya en los primeros 5.000-8.000 km.

Por eso, el taller debe ‘educar’ a sus clientes GDI sobre sus sofisticados motores y hacerles ver los problemas que pueden surgir, si se descuidan las ‘tácticas de defensa’ (mantenimiento) adecuadas.

Para una limpieza de depósitos más efectiva, un sistema de limpieza para motores de inyección directa de gasolina eficaz aborda soluciona rápidamente esta acumulación de carbonilla.

Y es que, si no estás prestando una atención especial a los motores GDI en tu taller, estás perdiendo una gran oportunidad, de ofrecer un servicio tan rentable para ti como eficaz para mejora del rendimiento de los motores de los coches de tus clientes, además de prevenirlos de costosas averías.

Los motores GDI son máquinas complejas, pero evitar sus problemas no tiene que ser ni difícil ni doloroso.